
lunes, 22 de marzo de 2010
EFECTOS SOMÁTICOS DE LA RISA

martes, 16 de marzo de 2010
GIMNASIA CEREBRAL

- Aprender con mayor facilidad y concentración.
- Enfocar y ordenar las actividades del pensamiento.
- Canalizar y aliviar el estrés.
- Concentrarse y mejorar la memoria.
- Optimizar habilidades de psico-motricidad.
- Facilitar las múltiples capacidades de aprender.
- Estimular la adaptación social.
- Orientar adecuadamente la autodisciplina y la atención.
- Mejorar los sistemas de lectura, escritura y procesos lógicos-matemáticos.
lunes, 15 de marzo de 2010
ANATOMÍA DEL SENTIDO DEL HUMOR

domingo, 14 de marzo de 2010
EL HUMOR FAVORECE EL APRENDIZAJE

jueves, 11 de marzo de 2010
¿Podemos aprender a reír?

sábado, 6 de marzo de 2010
CHISTES Y OCURRENCIAS COMO RECURSO DIDÁCTICO

¿Es posible la utilización de chistes como parte de nuestra programación diaria en el aula?
Expresión de buen humor es el empleo del chiste o la ocurrencia. La persona ocurrente posee un don natural del que carecemos el común de los mortales. Reacciona con rapidez ante las situaciones más variadas con una dialéctica chispeante, inesperada y a veces genial. La ocurrencia está presente en la conversación cotidiana y surge de un modo espontáneo, como un resplandor que ilumina momentáneamente. Algunas ocurrencias derivan en chistes que se propagan, con o sin añadidos, al margen de su creador original. Algunos chistes son como las ocurrencias: directos e impactantes; otros nos sorprenden por la complejidad de su elaboración y por su desenlace difícilmente predecible.
Salvador Camacho Pérez, El humor en la educación 1999
viernes, 5 de marzo de 2010
LA FORTALEZA DEL SENTIDO DEL HUMOR

- Que se valoren en prácticamente todas las culturas.
- Que se valoren por derecho propio, no como medio para alcanzar otros fines.
- Que sean maleables.
Debería aclararse, sin embargo, que lo que probablemente se valora en todas las culturas es un sentido del humor positivo, ya que el humor negativo a menudo produce rechazo y censura social.
Desde el punto de vista de la psicología positiva, el sentido del humor no se trata de un mero remedio para prevenir o ayudar a superar la enfermedad, sino una virtud que fomenta un mayor bienestar y disfrute de la vida, e incluso, como hemos visto, el crecimiento hacia una mayor humanidad y plenitud. En este sentido es interesante notar que diversas culturas consideran que un sentido del humor positivo es tanto el resultado como la causa de un elevado nivel de sabiduría o madurez emocional.
En las disciplinas místicas de oriente, y en algunas tradiciones de la psicología occidental, una disposición risueña se considera la señal de una persona altamente desarrollada (Jáuregui, 2004). Las representaciones artísticas del Buda, por ejemplo, muestran al maestro de esta tradición sonriendo plácidamente o incluso riendo a carcajadas, una risa que diversos textos budistas relacionan con la gran ilusión (broma) de las apariencias que según el budismo engaña al ser humano. En la tradición del yoga, uno de los ocho preceptos morales más importantes es Santosha, el deber de cultivar una actitud lúdica y alegre. De hecho, algunos de los líderes espirituales orientales más conocidos y venerados en Asia, como el actual Dalai Lama o Mahatma Gandhi, han demostrado un admirable sentido del humor a pesar de trayectorias vitales llenas de grandes tragedias personales, cargas de responsabilidad importantes y todo tipo de dificultades.
Al mismo tiempo, estas mismas tradiciones, y otras muchas, han recomendado el uso del humor positivo para superar las emociones negativas y las ataduras del ego, y así alcanzar la sabiduría. Las paradojas zen, por ejemplo, fuerzan al practicante a confrontarse con el absurdo para superar las limitaciones del lenguaje y el pensamiento, tratando de provocar un momento de iluminación o satori mediante la risa. Más cercanos a nuestra propia experiencia, los festivales y ritos que celebran la risa, la locura creativa, el juego, la sátira, la broma y el engaño (las fiestas españolas –en especial las Fallas Valencianas—, el fin de año, el "día de los inocentes") existen prácticamente en todas las culturas, proporcionando un escape de la rigidez mental que caracteriza el grueso de nuestras vidas.
Un sentido del humor positivo, en su máxima expresión, permite al ser humano afrontar los problemas y desajustes de la vida porque pone su vida entera en perspectiva. El ego, y todas sus ataduras, se observan con distancia, como si el mundo fuera un gran teatro y el individuo pudiera disfrutar el espectáculo desde las butacas. Puede reírse de si mismo y de todo, porque entiende que nada es tan importante como parece. Desde ese punto de vista, los pequeños y grandes problemas, los errores e imperfecciones, los desastres y las amenazas, ya no asustan ni intimidan. Desde ese estado de sabiduría, todo es vanidad, todo es ridículo, y las mayores logros y hazañas de la humanidad no es más que el trabajo de minúsculas e inocentes hormiguitas en un universo que escapa por completo a su limitada comprensión. Como dijo Charles Chaplin, "La vida es una tragedia en el primer plano, pero una comedia en el plano general".
miércoles, 3 de marzo de 2010
Una actitud positiva

En cuanto decidí retomar este contacto hice el compromiso con los lectores de compartir cuanto material llegara a mis manos. Por esa razón, hoy comparto con ustedes un fragmento realmente interesante del libro Reír es sano publicado por Allen Klein, un estudioso especializado en el fenómeno de la risa.
A medida que los científicos investigan la conexión entre la mente y el cuerpo, encuentran cada vez más evidencias que indican que nuestros sentimientos, pensamientos y actitudes no solo desempeñan un evidente papel en nuestra salud mental, sino que contribuyen también de manera importante tanto a nuestro bienestar físico como a nuestra capacidad para recuperarnos de las enfermedades.
Seguimos en contacto...
martes, 2 de marzo de 2010
Humorista, Comediante y Risoterapeuta... ¿Es lo mismo?

No, definitivamente no es lo mismo. En esta ocasión considero importante aclarar las marcadas diferencias que existen entre cada tendencia, porque cada una tiene un estilo particular para llegar a públicos definitivamente bien delimitados.
Se conoce como Humorista a quien comparte experiencias, sensaciones, representaciones y formas de entender la realidad que tienen como relato la diversión y la alegría, se relaciona directamente con la capacidad de generar entretenimiento, el cual se hace presente en la mayoría de las situaciones a través de la risa. Se considera que el humorista posee la capacidad de generar risas en las personas, independientemente de la cultura, el medio socio-económico o geográfico en el que se inserten, aunque el modo de activarse puede no sólo variar de sociedad en sociedad, de cultura en cultura sino especialmente de individuo en individuo, volviéndose entonces un fenómeno altamente complejo e indescriptible en términos científicos.
Generalmente el objetivo del humorista es plantear asuntos de interés colectivo de una forma menos rígida y más comprensible para todos, utilizando un idioma universal como lo es la risa.
Un comediante o cómico, es un actor que procura entretener al público, principalmente haciéndolos reír. Esto podría ser por medio de bromas o situaciones divertidas,
Un comediante "dice" cosas graciosas y un cómico "hace" cosas graciosas" lo que establece una distinción entre cuánto a la comedia puede atribuirse a los contenidos verbales y cuánto a la actuación y persona.
El objetivo principal del comediante es entretener a las personas a través de recursos como la ridiculización o exageración de las situaciones cotidianas con el fin de producir risas en la audiencia.
Risoterapeuta: a diferencia de los anteriores, esta actividad es realizada por un monitor, formado para transmitir la información acerca de los beneficios del humor y la risa a través de dinámicas y/o ejercicios para ayudar a conseguir los objetivos deseados por medio de la risa espontánea, es una herramienta para ayudar a que las personas tomen conciencia de eso de forma vivencial y teórica. Se realiza para la audiencia y no para sí mismo, sino para grupos específicos donde la meta es que las personas comprendan que la aplicación del buen humor en la vida diaria disminuye significativamente el impacto de cualquier circunstancia por la que se atraviese, sea esta de salud, crisis social, laboral o personal. Aprender a ver la vida desde una perspectiva más amena.
Es mi intención que conozcan mucho más sobre las labores que ofrece la risoterapia para hacer de nuestras vidas más placenteras, divertidas y provechosas.
Nos vemos en la próxima entrada...
siempre amiga... Sheyla.